Como la sexualidad se considera un tema tabú en nuestra sociedad, aún nos queda mucho por aprender. Como educadores sexuales, Carol y David intentan enseñar a la gente que el sexo es una actividad sana, no algo de que avergonzarse.
Ambos admiten abiertamente que son monógamos emocionalmente, pero que físicamente les gusta tener relaciones sexuales con otras personas. Carol nos cuenta que la variedad y las nuevas experiencias aportan mucho a su relación, y David subraya que la base de una relación abierta es un vínculo muy fuerte y la confianza.
Según la pareja, si queremos normalizar el diálogo social en torno al sexo, no debemos tener miedo a hablar de ello y abrirnos, al fin y al cabo, es una actividad cotidiana y habitual.